De vez en cuando me gusta rescatar esos platos sencillos y tradicionales que de sabidos, de hechos una y otra vez, parecen olvidados en la bloguería.
El asadillo manchego es una de las ensaladas más sencillas y sabrosas que conozco. Por supuesto, en Castilla-La Mancha es de sobra conocido, se pone de tapa en muchos bares y, especialmente en verano, de primer plato en muchos hogares.
El verdadero asadillo manchego lleva pimientos rojos y tomates. El toque de comino le da el sabor inconfundible. Esta sencillez permite que el asadillo sea una preparación versátil, que lo mismo te vale para el acompañamiento de una carne que de un pescado o de base para preparar un pincho.
Esta vez lo he utilizado para una tostada que bien podemos poner como un entrante, un aperitivo o una cena frugal.
Pensad nuevas combinaciones. Veréis que son infinitas.
Ingredientes
Para el asadillo
Tres pimientos rojos para asar
Cuatro tomates
Un diente de ajo
Cominos
Sal
Aceite de oliva
- Ponemos los pimientos y los tomates enteros en una fuente de horno y los ponemos a asar a 190ºC. Tardarán aproximadamente 75 minutos.
- Una vez asados los dejamos enfriar. Pelamos los pimientos y los cortamos en tiras. Pelamos los tomates y los partimos en tozos.
- Aliñamos todo ello con un majado que habremos hecho con el diente de ajo, unos poquitos cominos al gusto y la sal. Añadimos aceite de oliva y listo.
Para confeccionar la tostada
Pan de hogaza
Un diente de ajo
Un lomo de bacalao ya desalado
Aceite de oliva
- Mientras se enfrían los pimientos podemos ir confitando el bacalao. Para ello ponemos aceite a muy baja temperatura (unos 50ºC) con el diente de ajo dentro y el lomo de bacalao. Lo dejamos que se vaya haciendo muy lentamente. Cuando esté lo sacamos y escurrimos.
- Partimos el bacalao en lascas.
- Cortamos unas rebanadas de pan y las tostamos.
- Sobre ella ponemos una cama de asadillo manchego.
- Sobre el asadillo ponemos unas lascas de bacalao y regamos por encima con un hilo del aceite de los pimientos.
Servimos y comemos con una buena cervecita fría a la caída de la tarde.
Cocina Pasión